A las puertas del invierno, recordamos hoy una boda de pleno verano, la que Sonia y Jan celebraron un domingo de julio del año que estamos a punto de cerrar.
Fue una boda de día en la que los invitados y los novios pudieron disfrutar de las magníficas vistas y la privacidad de la finca. Después de una emotiva ceremonia civil llegó el turno del aperitivo y del banquete. Y como no podía ser de otra manera el baile cerró su gran día.
Os dejamos algunas fotos de su postboda. Sonia y Jan volvieron a elegir el Mas para su reportaje. ¡Preciosas!