Todas las parejas, se casen el día que se casen, tienen un gran temor: saber si el día de su boda va a llover. Lo entendemos perfectamente y por ello os vamos a dar unos pequeños consejos para tranquilizaros, ya que, en un día con lluvia puede llegar a ser un día precioso. Allá van:
-Tener un plan B para todos los espacios que se hagan al aire libre: un rincón tapado para la ceremonia y un espacio cerrado para el aperitivo.
-Disponer de unos preciosos paraguas para que ningún invitado se moje.
-La máxima precaución que debe tener la novia es que no se le mojen los bajos del vestido, porque sino el vestido va a pesar mucho más!
-Recordar la cantidad de refranes que existen sobre un día de boda lluviosa: “novia mojada, novia afortunada” y “novia lluviosa, novia dichosa”
-No os preocupéis por vuestro reportaje de fotos, haceros 4 fotos en un lugar tapado, pero luego elegir otro día para hacer un post-boda estupendo tranquilamente!
-Lo más importante: olvidarte absolutamente del tiempo y disfrutar de uno de los días más importantes de vuestra vida, rodeados de las personas que más queréis.
No os obsesionéis por ese tema, es algo con lo que no podréis hacer nada para evitarlo y lo único que podéis hacer es disfrutar de vuestro día, que lleváis tanto tiempo organizando.